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El papel del psicólogo durante un tratamiento de reproducción asistida

El apoyo psicológico para afrontar un tratamiento de Reproducción Asistida

La asistencia psicológica debe comenzar desde los primeros pasos del proceso de reproducción asistida, para ofrecer a los pacientes un espacio en el que puedan expresar y superar sus dificultades.

Los objetivos que persigue la intervención psicológica en tratamientos de fertilidad son muchos:

  • Facilitar la expresión emocional.
  • Identificar las posibles causas de la tensión psicológica. 
  • Controlar los síntomas físicos de la ansiedad y depresión. 
  • Promover los comportamientos adaptativos y funcionales.
  • Reestructurar cognitivamente los pensamientos molestos, promoviendo una interpretación más adecuada de la propia realidad.
  • Mejorar las habilidades asertivas y de comunicación dentro de la pareja.
  • Mantener una buena calidad de vida durante todo el proceso.
  • Superar y enfrentarse a la sensación que se suele sentir hacia las personas que logran el embarazo de forma espontánea.

Fases de la terapia psicológica enfocada en Fertilidad

La psicoterapia se desarrolla a través de diferentes fases:

Evaluación de la angustia emocional del paciente o de la pareja

Se lleva a cabo una entrevista cognitiva, acompañada de una prueba para evaluar el nivel de ansiedad, tristeza y estrés. Durante esta primera reunión, también se identifican las distorsiones o falsas creencias que dan lugar a los sentimientos de dolor.

Uso de métodos de autocontrol cognitivo

Se enseñarán comportamientos funcionales y formas de pensar racionales y constructivas de cara a las fases más complejas del tratamiento. Las técnicas de relajación se proponen como un complemento para el manejo de los síntomas de la ansiedad.

Modificación de la conducta de evitación

Se corrige el aislamiento social y familiar producido por el secretismo con el que se suelen llevar a cabo los tratamientos de reproducción.

Construir un sistema de comunicación eficaz

Se promueve el diálogo no sólo dentro de la pareja, que en situaciones de estrés tiende a empobrecerse, sino también hacia el equipo clínico, la familia y el entorno social.

También se enseñan técnicas de asertividad para afrontar situaciones críticas, como la solicitud de permisos de trabajo para acudir a exámenes médicos.

Diversificación del apoyo social

Se busca mejorar la capacidad de elegir las figuras de apoyo, de modo que no sólo la pareja sea responsable del apoyo emocional mutuo. Si dentro de una pareja hay diferencias sustanciales en la necesidad de apoyo externo, se establece un acuerdo sobre el tipo y la cantidad de información que se comparte con los demás.

Programación de actividades gratificantes

Se fomentan las actividades satisfactorias, que se hacen menos frecuentes por la implicación en el tratamiento y las emociones que se derivan del mismo.

Estudios sobre la intervención psicológica en los tratamientos de Reproducción Asistida

Burns (2005) ha subrayado que «el objetivo de la intervención psicológica es dotar de habilidades a los sujetos para poder vivir bien, aceptando lo inaceptable de la experiencia de infertilidad, y dándole un sentido personal a la experiencia vivida». Además, la terapia psicológica en parejas que se someten a un tratamiento de reproducción asistida ayuda a enfrentar las posibles limitaciones y afrontar la situación traumática, haciendo consciente a la persona de sus recursos, su resiliencia y sus límites como personas y como pareja.

Domar, Siebel y Benson (1990), Domar et al., (1992) Domar, Zuttermeister y Friedman (1999) Tuschen, Caffier et al., (1999) concluyeron que aquellos pacientes que se sometieron a intervención psicológica durante el proceso de reproducción asistida, obtuvieron los siguientes beneficios:

  • Disminución en niveles de ansiedad, estrés y depresión.
  • Mayor autocontrol emocional.
  • Mayor autocontrol cognitivo para neutralizar los pensamientos negativos, las anticipaciones de fracasos y las reevaluaciones de los mismos.
  • Refuerzo de la autoestima.
  • Mayor optimismo y cooperación en el tratamiento.
  • Incremento de la confianza y comunicación con el equipo médico.
  • Mejora en las dificultades de relación de pareja surgidas como consecuencia de los tratamientos.
  • Aumento de la percepción de calidad de vida y del bienestar personal.
  • Incremento de la percepción de control frente al seguimiento pasivo de los tratamientos.
  • Toma de decisiones más adecuadas y una consecuente mejor integración de los pacientes en todo el proceso médico.
  • Prevención y mejoría del desajuste psicológico cuando la situación de infertilidad se alarga.

Todo ello también se traduce en una menor tasa de abandono de los tratamientos y una mayor tasa de embarazos y nacimientos, frente a las pacientes y las parejas que siguen la atención médica de rutina sin ningún tipo de intervención psicológica.

¿Necesitas más información sobre tratamientos de Reproducción Asistida?

En Ehimar Salud, nuestra Psicóloga Encarna Hijano, especializada en Psicología Reproductiva y el Doctor José Ventura, médico especialista en Reproducción Asistida, Ginecología y Obstetricia pueden asesorarte y acompañarte durante todo el proceso del tratamiento de Reproducción Asistida.

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